28 may 2012

Sumando ropa

Pienso en lo poco que alcanza el dinero, la cosas que no puedo comprar. Comida gourmet, lsd, ropa, de la linda, para acercarme a una flaca que me encantá y se viste lindo. Por el momento he podido articular unas pocas y simples palabras tales como "hola" y "adiós" en cuatro largos meses de escasos minutos. Tiene un peinado de esos con flequillo, sexy, y un culo que parece digno de la big apple; me pone como el big ben a las twelve o'clock.
Pero Sumo y el aroma a ginebra que deambula en mis siete paredes, como un humo invisible, hace mierda las ideas y le da una mano al cerebro que empieza a pensar, yendo más allá, no hacia el futuro que esta mas allá, si no al más allá del presente en la cotidianidad. Aunque el futuro ya llego dice otro pelado.

-Rubio tarado sin Fiorucci, ¿te gustó el nuevo...Kurosawa? No sé cuanto tiempo llevo encerrado en este lugar.

Mejor las minas sin ropa, de toda raza y credo, tal vez con medias largas de las que llegan hasta el muslo y son multicolor. O las que son negras y rotas, que las usás en la cabeza mientras jugás con las manos en las tetas y te transformas en un revolucionario cualquiera que busca la libertad del sexo, peleando con algunos que te vienen con que los gays no son familia: santos sapos pedofilos capitalistas Batman. Esa gente que piensa distinto, y escuchás las discusiones que no sabes quien concientiza a quien, porque la conciencia es nuestra y somos nada más que los protagonistas de nuestra propia película.
De todos modos es algo metafísico. Excepto la ropa, hay que sacársela y hacerlo una cuestión física.
Are you all that different, are you just the same as me?

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